viernes, 24 de diciembre de 2010

A corazón abierto
o
Si supieras, entonces lo sabrías
y no andarías por el mundo preguntando
si la vena cava desemboca en el mar
o si las vírgenes lloran por su virginidad

Entrañas la ternura igual que un niño
y también posees su inocente sadismo.
No lo sabes, no puedes saberlo: 
tu cirugía del mundo es un infantil juego

¿Qué has descubierto después de tanto tiempo?
¿Conoces la muerte o al dios verdadero?
¿Conoces siquiera tu propio reflejo?
¿O todavía no sabes qué lado es el correcto?

No lo sabes, no puedes saberlo.
Pero si no lloras te diré un secreto.
Vamos, a jugar entre los muertos.
Vamos a sacarle los ojos a los cuervos.

Los árboles son serios, sólo hablan con el viento.
Las estrellas vomitan deseos sobre la tierra.
Pero tu no debes desear nada, hermana.
Eres tan hermosa, que te arrancaré la cara




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